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domingo, 11 de noviembre de 2012
El Mirador de las Tres Victorias
Os dejo mi último dibujo, El Mirador de las Tres Victorias, y unas fotos de detalle del mismo.
Gabriela, así es imposible.....no, te lo digo de otro modo: verte dibujando (adentro de tu dibujo) hace que descubramos que en realidad las costras nunca han existido, porque las heridas nunca lo fueron.
Sueñan las Victorias es éxtasis como triunfo, jadean y gimen la esperanza del verbo nutrido por sus sueños. sueñan entre sí, imagino, y en la traza del lápiz quizá nos deje esa metáfora de la estatua que exige alas para el encuentro. Pero esa desnudez, flagrante e inexpresiva, fetal u originaria, ciega tanteando o deseando tocar, también parecen exigirlo. Alas, alas ¡Alas!. ¡Alas para que la carne sea cópula, vida! Alas para el sueño! Alas para lo soñado! Besos.
Qué pasada...
ResponderEliminarTe felicito.
Francamente una genialidad. Aulla el dibujo.
ResponderEliminarAbrazos.
Gabriela, así es imposible.....no, te lo digo de otro modo: verte dibujando (adentro de tu dibujo) hace que descubramos que en realidad las costras nunca han existido, porque las heridas nunca lo fueron.
ResponderEliminarUn beso.
Muy logrados los espacios.
ResponderEliminarFelicidades.
Saludos.
Te he dicho que te adoro?
ResponderEliminar¡hay mucho talento!
ResponderEliminarsaludos
Guau, Gabriela!
ResponderEliminarEs fantástico.
Un abrazo.
Tus dibujos tienen un aura de solidaria soledad en la que todavía es posible encontrar refugio.
ResponderEliminarUn abrazo ;-)
Sueñan las Victorias es éxtasis como triunfo, jadean y gimen la esperanza del verbo nutrido por sus sueños. sueñan entre sí, imagino, y en la traza del lápiz quizá nos deje esa metáfora de la estatua que exige alas para el encuentro. Pero esa desnudez, flagrante e inexpresiva, fetal u originaria, ciega tanteando o deseando tocar, también parecen exigirlo. Alas, alas ¡Alas!. ¡Alas para que la carne sea cópula, vida! Alas para el sueño! Alas para lo soñado! Besos.
ResponderEliminarFelicitaciones!!!!
ResponderEliminarMagnífico !! las palabras serían pocas para tanto talento.
ResponderEliminarBesos
El detalle de la escalera, que se retuerce en ondulante alabastro hacia un cielo de emociones.
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